La gran mayoría de los planes e iniciativas internacionales aluden a construir, expandir y modernizar la infraestructura TIC de las escuelas de los países como un piso para la apropiación de las TIC y la democratización de las mismas.
Un ejemplo de lo anterior es Singapur, que en su Primer Plan Maestro (1997-2002) plantea asegurar la incorporación de la infraestructura tecnológica primordial para las escuelas y la capacitación de los docentes en el uso básico de las TIC.
Otra medida destacada para democratizar el conocimiento es a través de los Recursos Educativos Abiertos (REA) y las plataformas de democratización del conocimiento como los portales educativos públicos.
Por ejemplo, “Learning from home” y Ki te ao Marama, son 2 plataformas creadas en Nueva Zelanda en 2022, con el objetivo de apoyar a los docentes, estudiantes y padres para que el aprendizaje de niños y jóvenes pudiera continuar desde la casa.
Para avanzar hacia la adopción de las TIC, los países con estrategias exitosas han creado sistemas para toma de decisiones basadas en datos. Por ejemplo, en Estonia, a través de la Fundación HITSA desarrolla, administra y mantiene redes escolares y su conectividad externa, entre ellas, es posible mencionar los Sistemas de Información de Admisión (SAIS) que se utilizan para las solicitudes de admisión en línea de las instituciones educativas, usando una identidad digital emitida por el Estado.
Estos países también han buscado avanzar hacia una formación docente pensada para el siglo XXI. Por ejemplo, en Estonia, el proyecto Tiger Leap Plus (2001-2005) se orientó a la adopción de las tecnologías mediante el desarrollo de las competencias tecnológicas de profesores y estudiantes o Suiza a través de su Plan TIC en Educación (2007) enfatizó integrar las TIC en la docencia: en todos los niveles, como herramienta y recurso para todas las asignaturas, así como un conjunto de competencias afines a impartir en el marco de la educación de medios en general y garantizar la alfabetización digital.
Bajo la premisa de que el aprendizaje no está acotado a un período específico de la vida, algunos países han incorporado este enfoque en sus planes educativos. En Estonia, el “Plan estratégico de Aprendizaje a lo largo de la vida” del año 2020, busca proporcionar a todas las personas del país oportunidades de aprendizaje a lo largo de su vida, adaptadas a sus necesidades y capacidades. Se incluyen medidas estratégicas encaminadas a lograr un enfoque digital que abarque una cultura digital en el proceso de aprendizaje de todas las personas.
Por último, el “Enfoque de Tecnologías Digitales” está presente en muchas escuelas australianas que buscan enseñar tecnologías digitales. Uno de los desafíos es mejorar las habilidades digitales docentes, y se facilitan a las escuelas kits de robótica y electrónica y programas de desarrollo profesional en línea. En ese sentido, es fundamental que los gobiernos impulsen políticas e iniciativas que logren llegar a las comunidades educativas para fomentar ambientes innovadores que faciliten y promuevan el uso de las TIC.